ENTREVISTA A MIRIAM BEIZANA VIGO
Cuando Miriam Beizana comenzó en el mundo de la escritura no buscaba fama. Y ahora que está saboreando los inicios del éxito, tampoco. La autora gallega escribe porque le apasiona y consigue reflejar esta pasión en la profundidad e historias de sus personajes. Con 3 novelas ya a la venta, Miriam sigue apostando por la autopublicación porque ve en esta alternativa el salvoconducto entre ella y sus lectores. Aun así, le encantaría poder encontrar un hueco en algún sello editorial.
Gracias Miriam por concedernos esta entrevista.

-Pregunta: Un tema que le interesa a todos los escritores noveles son los inicios de otros escritores, ¿Cuándo empezaste a escribir?
-Respuesta: Empecé a escribir desde que supe hacerlo, desde que conocí las palabras y las hice mías. De niña tenía una imaginación desbordante y apabullante. Las ideas y fantasías fluían con facilidad en mi mente (qué bonito sería recuperar aquello). Creí entre la realidad y mi propia ficción, dónde me refugiaba de la misma. Siempre fui dos «Miriam» a la vez. El primer relato que escribí fue cuando tenía tan solo 5 años: una historia de amor entre el sapo Sano y la sapa Sana. Con tan solo 8, había concluido un cuento largo titulado El caldero mágico, inspirado en la película de Disney y en el libro La cabaña del tío Tom.
-P: Tienes ya varios libros y todos autopublicados, ¿Por qué te decidiste en autopublicar?
-R: Cuándo estaba terminando de escribir Marafariña (2015) tenía muy claro que quería autopublicarla. Tal vez porque sentía que esa novela me pertenecía demasiado, tenía tanto de mí que no podría ser de otro modo. Quise vivir la aventura completa, ser el salvoconducto entre yo misma y las personas que la leyesen. Fue, si me permitís, un intrépido salto al vacío que me permitió hacer que esa historia sobreviviera y llegara hasta dónde ha llegado hoy.
Con Todas las horas mueren (2016) decidí probar suerte en el Premio Indie organizado por Amazon ese año. No hubo suerte, pero me sirvió para ganar visibilidad. Aproveché la misma tesitura para terminar mi bilogía (o trilogía, según se mire) con Inflorescencia (2018).

-P: Escribir un libro tan largo y completo como Marafariña no es una tarea que se hace del día a la mañana. Requiere mucho tiempo y esfuerzo que esperas que luego se rentabilice en lectores. ¿Cómo te decidiste a escribir esta primera obra tuya?
-R: El proceso creativo de Marafariña fue especial, largo y tuvo vida propia. Recuerdo ese título desde que era adolescente y creció conmigo. Fluctuó como una vegetación independiente a mí. Primero fue una novela fantástica, luego una novela de misterio íntima hasta que finalmente me despojé de mis miedos y se convirtió en ficción autobiográfica. Ruth, Olga y el resto de los personajes me acompañaron durante años, me protegieron. Son mis mejores amigas y lo seguirán siendo siempre que mi amor por la literatura exista. Creo que yo no me decidí a escribir esa opera prima; de algún modo fue ella misma la que lo decidió.
-P: Tras Marafariña has autopublicado varios libros más. ¿Seguirás autopublicando o intentarás publicar en alguna editorial?
-R: Mi idea sería encontrar la manera de publicar bajo un sello editorial mis nuevas historias. He comenzado a conseguir pequeñas colaboraciones en antologías y ese camino me gusta y quiero continuar.
-P: ¿Cómo conseguiste que tu libro autopublicado llegara a lectores más allá de tus amigos y familiares?
-R: Fue magia. Todavía no sé cómo pero ocurrió. Pero ocurrió despacio, sin prisa. Primero el boca a boca, después las reseñas. La novela empezó a impactar y empezó a dar que hablar. Me dediqué a escribir sobre lo que escribí en mi web y, todo lo demás, se fraguó. El truco está en dejar huella, en traspasar los límites (pero no sé cuáles son esos límites). Lo que ocurrió fue que yo necesitaba contar una historia que alguien, al otro lado, necesitaba leer.

-P: ¿Lees más en ebook o en papel?
-R: Combino ambos formatos y depende de la época del año. El libro en papel, no obstante, siempre es más especial y más íntimo. Y, sobre todo, te hacen compañía desde las estanterías.
-P: ¿Tienes algún otro libro en mente o que estés ya escribiendo?
-R: Llevo más de dos años trabajando en una novela extraña que me ha atrapado. La odio y la quiero. Pero me lo tomo con calma, lo disfruto. Y lo sufro. Si en Marafariña hablaba sobre religión y sexualidad; y en Todas las horas mueren sobre mi miedo a la muerta y el paso del tiempo, mi última composición hablará de amistad, amor, heridas y literatura.
-Si tuvieras que llevarte tres libros a una isla desierta, ¿cuáles te llevarías?
No podría irme sin Nada de Laforet, de ninguna manera. También me llevaría Lágrimas en la lluvia de Rosa Montero, y probablemente V y V Violación y Venganza de Pilar Bellver.
-Y por último, nos gustarías que dieras un consejo a los jóvenes escritores. Y por cierto, muchísimas gracias por concedernos la entrevista.
A los jóvenes escritores les aconsejo amor por lo que se hace y personalidad propia. Y constancia. Olvidarse del ruido de alrededor y dedicar todo el tiempo que se pueda a leer aquello que anhelarías escribir. Las flores si se riegan y se cuidan crecen y se vuelven hermosas. Pero se necesita tiempo, cariño y paz. Y muchísimas gracias a vosotros por entrevistarme. Ha sido un placer.
Gracias Miriam Beizana!