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10 Preguntas antes de publicar un libro

¿Qué debes tener en cuenta antes de publicar un libro? En Bookmundo sabemos que publicar un libro es el último paso de un proceso largo y arduo. Y antes de llegar a ese paso seguro que te asaltan dudas. ¡No te preocupes! Estamos aquí para ayudarte y para repasar contigo los pasos que vienen antes de publicar un libro, como la calidad de la portada y el manuscrito. Llevamos mucho tiempo trabajando en el mundo de la autopublicación y hemos visto lo que funciona y lo que no. Por suerte para ti, hemos identificado varios factores que pueden determinar el éxito de tu libro.

En este blog te proponemos 10 preguntas que te deberías hacer antes de publicar un libro. Una vez seas capaz de responder a todas ellas con confianza, ¡estarás listo para darle al botón de publicar en Bookmundo!

¿Qué debes tener en cuenta antes de publicar tu libro?

  1. ¿Tu primera frase es convincente?
  2. ¿Tu trama es consistente?
  3. ¿Algún Plot Twist?
  4. ¿Utilizas siempre el mismo narrador?
  5. ¿El tiempo juega a tu favor?
  6. ¿La frase final deja con ganas de más?
  7. ¿La estructura está bien definida?
  8. ¿La cubierta es atractiva?
  9. ¿El título es redundante?
  10. ¿La sinopsis capta la atención del lector?

Recuerda que en Bookmundo puedes publicar tu libro gratis en un par de pasos. Tan fácil como lees. Crea una cuenta ahora (o después de leer este artículo) y publica tu libro.

1. ¿Es tu primera frase lo suficientemente convincente?

Una buena portada cumple el papel de seducción a primera vista. Una portada atractiva llamará la atención de la gente de entre la gran cantidad de oferta de libros ahí fuera. Si este primer paso tiene éxito, lo siguiente que sucederá es que esa persona abra tu libro, y por tanto la primera frase es esencial. Una frase bien escrita y cautivadora añadirá aún más atractividad a tu libro.

Podemos utilizar como ejemplo esta primera frase de Franz Kafka:

“Alguien debía de haber calumniado a Josef K., porque, sin haber hecho nada malo, fue detenido una mañana”. – El proceso, Franz Kafka

La obra de Kafka ha persistido a lo largo del tiempo por muchas razones, pero una de ellas es por su gran habilidad de escribir una primera frase de lo más cautivador. Kafka no pierde el tiempo en adentrarse en su mundo narrativo, más bien, trata de arrastrarnos a él desde el primer instante.  La brusquedad con la que nos vemos inmersos en esta escena tan dramática es probablemente una reminiscencia de lo que el propio protagonista debe sentir cuando se despierta una mañana, y le arrestan repentinamente.

Debes tener en cuenta lo siguiente: trata de entender las emociones de tus lectores y haz que ellos mismos se hagan preguntas que solamente podrán responder si siguen leyendo. En este ejemplo, Kafka se aprovecha de un miedo común que mucha gente padece: ser acusado y arrestado injustamente. Esta simple frase hace que surjan varias preguntas en la mente del lector, tales como: “¿Quién es Josef K.?”, “¿Que ha hecho?”, “¿Es verdaderamente inocente?” “¿Quién le está arrestando?” Y si tiene razón el narrador, “¿Quién le calumnio, y por qué?”

Podrías simplificar la primera frase aún más, como lo hizo Andy Weir, (que por cierto, también es un autor autopublicado) en su libro, El Marciano:

“Estoy bien jodido” – El Marciano, Andy Weir

Esta frase atrae sin lugar a dudas nuestra atención. No solo queremos saber por qué el narrador está tan seguro de su situación, sino que el uso de un lenguaje tan obsceno despierta eficazmente la mente del lector, haciendo que pase de ser alguien meramente curioso a alguien activamente interesado. Las frases cortas e impactantes son muy buenas para empezar una historia. Antes de publicar tu libro, asegúrate de que la primera frase es muy buen gancho.

2. Haz un boceto de tu historia  antes de publicar tu libro e identifica los puntos más importantes de la trama. ¿Están estos puntos lo suficientemente desarrollados a lo largo de tu libro?

Contrario a la creencia popular, un buen giro no siempre hace una buena historia. Como autor, es importante que identifiques los puntos más importantes de tu historia. Haz una línea del tiempo y marca estos puntos en color – incluso puedes crear un esquema codificado por colores para diferenciar entre diferentes puntos de la trama, o aquellos que pertenecen a personajes específicos.

Este pequeño ejercicio te ayudará a visualizar tu historia e identificar las secciones donde los desarrollos más importantes son escasos o demasiado frecuentes. Generalmente te recomendamos no usar más de dos puntos principales de trama en tu libro.

También te recomendamos pedirle a tus amigos o familiares que lean tu historia. Si puedes contar con que te den su honesta opinión, esto te dará información valiosa con respecto al ritmo, la claridad y el nivel de dificultad de leer tu libro.

3. ¿Hay algún giro de la trama o de personaje en tu historia?

¿Recuerdas que hace unos párrafos te dijimos que un giro en la trama no necesariamente significa que sea una buena historia? Bueno, eso no significa que debas evitar un buen giro si es que lo tienes.

Naturalmente, los giros de trama no son el único factor determinante cuando se trata de escribir un buen libro. Sin embargo, sí que ayudan a captar la atención del lector y hacer que tu libro quede grabado en su memoria – algo que, como autor autopublicado, debería ser una prioridad esencial.

Un método comúnmente utilizado en la literatura es conseguir crear un personaje con el que el lector se sienta identificado, que desarrolle simpatía hacia él, para que luego dicho personaje haga algo fuera de lo normal o inesperado y en desacuerdo con esta personalidad relacionable. Por ejemplo, una ama de casa aburrida que está planeando un asesinato, o un profesor de química que se convierte en traficante de drogas.

4. ¿Desde qué perspectiva está escrito tu libro? ¿Te aferras a ella durante toda la historia?

La perspectiva desde cual escribes tu libro determina como el lector percibe la historia. Un problema común que vemos en varios libros autopublicados es que el autor cambia la perspectiva desde cual está escrita la historia varias veces durante el libro. Esto tiende a confundir al lector y hace difícil que se sumerja en la historia. Hay autores que han intentado incorporar varias perspectivas en su libro (con diferentes grados de éxito), pero, en general, te recomendamos que uses tan solo una, a menos que tu gusto te diga absolutamente lo contrario. 

A continuación, te presentaremos varias perspectivas que puedes utilizar en tu libro. Antes de publicar tu libro, revisa cuál de ellas estás utilizando, si es apropiada para la historia, y si la mantienes de manera consistente a lo largo de todo el libro.

Perspectiva de tercera persona

Tradicionalmente esta es la perspectiva más usada. Se trata de una identidad no especificada que narra la historia del lector. Como esta identidad narradora no está involucrada en la historia, no hace falta proporcionar ningún tipo de información sobre ella.

Hay dos tipos principales de perspectivas en tercera persona:  

Narrador Omnisciente: En este modelo de narración, el narrador es consciente de todo lo que pasa en el mundo, los acontecimientos, lugares, personajes y sus sentimientos.

Narrador Limitado: Como el nombre implica, este modelo de narración ofrece una perspectiva más limitada del mundo. Normalmente solo proporcionando el propio conocimiento, pensamientos y sentimientos del personaje principal.

Perspectiva de segunda persona

La perspectiva de segunda persona es más singular y menos utilizada, especialmente en la ficción popular. Esta perspectiva sirve para convertir al lector en un personaje de la historia.

Perspectiva de la primera persona

Este punto de vista es para los que de verdad queréis invitar al lector a que se sumerja en la mente del personaje principal. La primera persona revela la historia desde la perspectiva de dicho personaje, que o bien está experienciando la historia en tiempo real, o la ha experienciado en el pasado.

La perspectiva alternativa

Como se mencionó anteriormente, esta perspectiva puede ser muy difícil de dominar. Sin embargo, si de verdad quieres contar tu historia tanto desde la primera como desde la tercera persona, no es algo que sea imposible de hacer. Por ejemplo, quizá quieras contar tu historia desde la tercera persona, pero también quieres incluir entradas del diario de un personaje de vez en cuando, en este caso la perspectiva alternativa puede ayudar a contar la historia.

Ten cuidado con la perspectiva alternativa, ya que requiere más vigilancia – tus lectores se pueden perder en la historia si el cambio de perspectiva ocurre muy frecuentemente.

5. ¿Hay un buen balance entre el tiempo interno y el tiempo del discurso?

¿Escribirías una novela de mil páginas en la que solo narrases un período de 5 minutos? A menos que seas James Joyce, probablemente no. Por eso es siempre importante considerar el balance entre el tiempo interno (lo que duran los acontecimientos) y el tiempo del discurso (lo que ocupa el discurso narrativo). 

Encontrar un buen balance entre estos dos factores es importante para que tu libro sea agradable y fácil de leer. Esto significa que si vas a escribir una historia con un tiempo interno corto, tendrás que escribir con mucho detalle y viceversa.

6. ¿Tu frase final deja al lector con ganas de más?

Como autor, eres el maestro de tu propia historia. Concluir tu libro con un final abierto o cerrado está es una decisión que está totalmente en tus manos. Sin embargo, un buen final debe conmover al lector. Ya sea como resultado de una sorpresa, tristeza, alegría o cualquier otra emoción, tu objetivo es crear una emoción muy fuerte. Si logras hacer esto, tu lector habrá creado una conexión con tus personajes, por lo que habrás triunfado. Puedes ver tu frase final como una especie de despedida, y como todos sabemos, una buena despedida te acompañará por mucho tiempo. 

7. ¿La estructura de tu manuscrito se ajusta a tu historia?

El formato de tu manuscrito actúa como un “rastro de migas de pan” para tus lectores. Por esa razón es tan importante asegurarte de que la estructura de tu libro esté claramente establecida. Aquí es donde entran en juego los capítulos.

Si tu historia tiene tramas complejas, tales como perspectivas alternativas o diferentes líneas de tiempo, éstas se beneficiarán mucho de los títulos de capítulos que pueden proporcionar al lector información adicional, como el nombre del personaje cuya perspectiva está siendo presentada en el siguiente capítulo. Esto hará que tu historia sea más fácil de seguir. Por otro lado, si tu historia está en orden cronológico, te podrás conformar con capítulos numerados.

Además, vale la pena saber que la mayoría de los lectores tienden a leer uno u dos capítulos antes de guardar el libro. Es más raro dejar de leer a mitad de un capítulo. Por lo tanto, la longitud de los capítulos también es importante. La mayoría de los lectores prefieren leer segmentos de texto más cortos y estructurados a leer páginas y páginas de texto ininterrumpido. En otras palabras, los capítulos dan tiempo a los lectores para respirar y reflexionar. Además, crear un ambiente de suspense al final de cada capítulo, conseguirá sin duda que el lector siga leyendo sin parar. 

Por lo tanto, al dividir tu historia en capítulos, ten en cuenta que cada uno de ellos debería contener una pequeña historia. Esto significa que en principio tu primera y última frase de cada uno de ellos deben tener la misma función que la primera y última frase de tu libro: mantener al lector activo y con ganas de más.

8. ¿La portada de tu libro complementa la historia?

Vamos a aclarar algo de una vez por todas: no tienes que ser diseñador gráfico profesional para crear una bonita y representativa portada para tu libro. Si decides diseñar tu propia portada (y no eres diseñador gráfico), recuerda que menos es más. Cuando estés diseñando tu portada, quieres apostar por una cocina escandinava en lugar de una catedral mediterránea. Una bonita imagen con una fuente elegante es mejor que una imagen caótica con una fuente exótica. Si no sabes qué fuente tipográfica usar para tu libro, te recomendamos que leas nuestro artículo de blog: ¿Qué fuente tipográfica usar para tu libro ?». Y para aprender cómo diseñar una portada, también te recomendamos: «¿Como diseñar la portada de tu libro con Canva?«

Esto, por supuesto, no es una regla que debes seguir al pie de la letra. Al fin y al cabo eres un autor, y pensar más allá de lo normal es parte de tu trabajo. Sabemos que los libros autopublicados son juzgados mucho más duramente que los libros tradicionales, por eso te recomendamos emular el aspecto y la sensación de un libro tradicional lo máximo posible.

9. ¿El título de tu libro aparece demasiado frecuentemente en tu historia?

Un buen titulo no tiene por qué ser reiterado en cada uno de los capítulos. El lector debería poder empezar a entender el significado del título a medida que avanza la historia.

Tomemos por ejemplo El jardinero fiel de John le Carré. Es un título algo ambiguo. ¿A qué se refiere el autor? Seguramente no puede ser un libro sobre un jardinero a tiempo completo – especialmente en la sección de Thriller-. Una vez que leas el libro, notarás que el título no es mencionado en la historia. Más bien, la metáfora de la jardinería y lo que significa el título se hace aparente a medida que vas leyendo.

Por supuesto, también puedes optar por un título más accesible. Ten en cuenta que este debe simular el estado de ánimo y sentimiento de tu historia. Idealmente, también debería ser lo suficientemente intrigante como para despertar cierta curiosidad.

10. ¿La sinopsis en la contracubierta de tu libro capta la atención de un lector en 10 segundos?

¿Has hecho uso de los consejos mencionados anteriormente? Normalmente la tapa de un libro contiene una corta descripción promoviendo el libro. Es importante escribir un mensaje apasionante y tentador, de esta manera te aseguras de maximizar el número de personas que deciden comprar tu libro. Escribir este pequeño anuncio no es tan fácil como parece. Te aconsejamos revelar solo partes del principio del libro, sin introducir a muchos personajes. Tu objetivo es interesar al lector lo suficiente para que se decidan a comprar el libro.

Además, si ya has autopublicado un libro antes, puede ser mucho más beneficioso incluir reseñas de ese libro para acompañar a tu material publicitario. Ponte en contacto con un revisor (o varios) que haya evaluado tus libros anteriores y envíales una copia. Si es tu primer libro, o si no quieres añadir una reseña, te recomendamos añadir una cita cautivador de tu historia. En este artículo de blog, varias bloggers de reseñas literarias nos ofrecen algunos consejos acerca de cómo aproximarte a ellas para conseguir una crítica para tu libro

Has resuelto tus dudas antes de publicar tu libro, ¿y ahora qué?

¡Eso es todo! – si tienes bajo control todo lo mencionado en este artículo deberías estar más que listo para publicar un libro. Si tienes alguna idea o sugerencia para este artículo, ¡no dudes en dejar un comentario!

Recuerda que con Bookmundo puedes publicar tu libro online, desde casa y en un par de clicks, y obtener regalías de hasta el 60%. Consulta cuánto podrías obtener por cada copia vendida y crea una cuenta gratis para empezar.

Además, si tienes alguna pregunta sobre la plataforma en sí, o sí estás interesado en contratar ayuda profesional para la publicación de tu obra, no dudes en contactar con nosotros en info@bookmundo.com antes de publicar tu libro.

¡Buena suerte!